Legión (Pelicula): En realidad Dios es el malo

Tras ver la película Legión, debo decir que lamento tremendamente haber dedicado mi tiempo a ver como se trata de tergiversarlo todo, haciendo a Dios malo y a aquellos que se rebelan ante él buenos.

Lo primero que se muestra es a Miguel (Michael), un ángel caído por iniciativa propia que se niega a aceptar las órdenes de Dios. Al caer a la Tierra, se arranca las alas, que le suponen una pesada carga - según dice-, y se hace con un arsenal preparándose para lo que Dios tiene preparado, un Apocalípsis un tanto peculiar.

El mundo ha llegado a colmar el límite de la paciencia de Dios, y el director de la película construye a un Dios cansado, iracundo, cegado por el odio . Ya destruyó el Mundo con el diluvio, dando la posibilidad al ser humano de volver a empezar, pero ahora es distinto. Dios olvida todas las promesas de redención hechas al hombre y se propone aniquilar a la especie humana.

Por supuesto, la película, obvia, elimina de la historia a Jesús y el sacrificio que hizo para salvarnos. No existe redención, no existe sacrificio válido, la muerte de Jesús no sólo desaparece sino que además no sirve para nada.

De hecho, el ángel protagonista (Miguel), al que conocemos como el arcángel Miguel que luchó contra el Dragón y entendemos que es el mismo Jesucristo antes de encarnarse, es un ángel de oscuras alas que se rebela ante su Creador porque no está de acuerdo con el exterminio humano.

Ese ángel Miguel discute con el ángel Gabriel y le dice que no está dispuesto a hacer lo que Dios le pide porque realmente Dios no sabe lo que necesita: "No voy a hacer lo que Él pide sino lo que Él necesita". Nos muestra a un Dios que no sabe lo que necesita, un Dios errado por la ira.

La película trascurre en medio de un desierto, en una estación de servicio de carretera aislada y decadente en la que Miguel debe proteger a una embarazada - que odia al bebé que lleva dentro - porque ese niño es la esperanza de la humanidad.

Hasta esa estación se acercan las legiones de ángeles enviadas por Dios, pero no son ángeles de luz como describe la Biblia, sino seres humanos poseídos por ángeles. Esos humanos posesos tienen dientes como de tiburón y caminan por las paredes y el techo, atacan a los no posesos y pretenden matar al bebé no nacido.

Hasta tal punto son diabólicos esos "ángeles" que en la misma película, los protagonistas se refieren a ellos como demonios, mientras que Miguel les corrige diciéndoles que son ángeles.

No voy a reventar más la película, pero quiero recomendar que no se pierda el tiempo y por supuesto no se abra la mente a una película que pone a Dios como el malo y al ángel rebelde como el bueno. Yo me arrepiento de haberla visto.

Todos sabemos quién a dirigido realmente esta película, Satanás es el dios de Hollywood, el dirige casi todo allí. Si analizamos las últimas peliculas taquilleras vemos que muchas de de ellas hacen referencia a lo paranormal, a magia, a mitología, a vampiros, etc. y aunque todo va en base a que es la moda, es Satanás quién marca las tendencias porque sabe bien como manipularnos.

En conclusión, he aquí una película, estilo Resident Evil, que nos muestra a un Dios terrible que no tiene a ángeles sino a demonios sirviéndole, que los envía a aniquilar a la humanidad definitivamente, mientras que un ángel cuyo nombre significa "quien es como Dios" se rebela y desciende para proteger al ser humano, porque Dios se ha vuelto loco y no sabe lo que quiere. Posiblemente la versión que esgrime Satanás de su historia entre él y Dios.

En fin, Satanas agota sus cartuchos porque sabe que el fin está cerca. Hace propaganda de sí mismo y pone a Dios como un loco iracundo y destructor.

Jesús viene pronto. Que Él os bendiga.