Y en el Sur de América, más de 5.000 personas han resultado damnificadas por un inusual temporal de viento, lluvia y nieve que ha afectado en los últimos días el extremo norte de Chile, caracterizado habitualmente por su clima desértico. Atacama se parecía literalmente a la Antártida.
Un sismo de 7.8 grados en la escala de Richter estremeció las islas neozelandesas de Kermadec en el océano Pacífico, lo que ocasionó que autoridades de ese país levantaran una alerta de tsunami.
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