España: Estado de alarma ¿indefinido?

Dezpierta: He de reconocer que no caí en la cuenta de la difícil situación en la que se encuentra España actualmente hasta que no entré en el blog de Jorge, "el Oráculo de Occidente", y pude entender como este "estado de alarma", supuestamente producido por una huelga de controladores, no es simplemente un nombre que se le ha dado a esta situación sino que es un procedimiento gubernamental, administrativo, político y militar, que precede al "estado de excepción" y que posibilita una serie de actuaciones políticas incluyendo la intervención del ejército contra la población, el bloqueo de empresas privadas y públicas, así como servicios tales como el teléfono o internet.

Con la burda excusa de proteger el tráfico aéreo y con el apoyo de los indignados viajeros, el gobierno de España ha proclamado un estado de emergencia digno de un país al borde del abismo, la guerra o la quiebra. Y algo muy curioso es el apoyo del partído de la oposición en este tema, que normalmente siempre critica cualquier actuación del gobierno, por aceptable que sea.
(El PP apoya el estado de alarma).

Y el caso es que hoy, el gobierno ha recibido apoyo de otros partidos minoritarios para prolongar el estado de alarma indefinidamente, a pesar de que existe una normativa que limita su tiempo de aplicación.

En estos momentos, la normalidad en los aeropuertos es absoluta y el 96% de los controladores se han reintegrado a sus puestos de trabajo. Las causas de toda esta situación se encuentran en la aprobación, en febrero de 2010, de un real decreto-ley por el que AENA asumía la gestión del control aéreo y dejaba de tener validez el Convenio colectivo (prorrogado desde 2004) de los controladores aéreos. Estos profesionales recurrieron esta disposición en los tribunales, que se convirtió en ley tras su tramitación parlamentaria, y que perdieron en la Audiencia Nacional.

En verano, los controladores amenazaron con una huelga, que finalmente retiraron tras la firma de un compromiso con AENA para sentar las bases de negociación del nuevo convenio. Durante estos últimos meses han sido varias las reuniones para intentar cerrar un nuevo convenio, que no han fructificado. A final de noviembre, el sindicato USCA anunciaba que muchos controladores habían llegado al tope máximo legal de trabajo de 1.670 horas anuales, por lo que, por ley, no podrían acudir a sus puestos de trabajo.

Esto ya empezó a provocar problemas en el aeropuerto de Santiago de Compostela. El pasado viernes, el Gobierno aprobó una medida que clarifica el cómputo de las horas. Y esta fue la gota que colmó el vaso del control aéreo, desatando el caos. Fuente

No estábamos ante un conflicto laboral, sino ante un «desafío al orden democrático» y no hubo imprevisión, sino firme determinación de acabar con una situación insostenible. Éstas fueron las dos ideas esgrimidas por Zapatero durante su parlamento, en el que no aclaró cómo retomar la normalidad cuando se desactive el Estado de Alarma ni si éste será o no prorrogado. De ser así la decisión requeriría, esta vez sí, del apoyo de la mayoría del Congreso. Y, aunque no es en principio éste el escenario que prevé el Ejecutivo, el presidente prefirió mantener la incógnita («No vamos a estar en Estado de Alarma ni un día más ni un día menos de lo que necesiten los ciudadanos de este país para circular sin ser chantajeados por los controladores aéreos», dijo).Fuente

Nota dezpierta: Lo cierto es que desde los medios de comunicación hasta el parlamento se ha denominado esta huelga de controladores como "huelga salvaje", acusándolos de sedición y llegando incluso la guardia civil (que es un cuerpo militar del estado), metralleta en mano, a buscar a los controladores para obligarlos a volver a sus puestos de trabajo, siendo éstos simples funcionarios y no militares (a los que si sería aplicable este tipo de obligación). Aunque al parecer han militarizado ese sector, para poder aplicarles las sanciones y la disciplina oportunas. Como nos descuidemos, un día nos levantamos con los barrenderos militarizados y pudiendo ser acusados de traición por negarse a recoger cacas y chicles.

No sé si esto ha sido una estrategia del gobierno para proclamar este estado de alarma, viendo la que se nos viene encima con una quiebra estatal inminente, pero es demasiado chocante ver como la oposición apoya una medida tan radical como esta y estaría abierta a apoyar la prórroga si los motivos fueran contundentes.

Creo que, en primer lugar, se ha provocado esta situación anunciando las medidas como la venta del 49% de los aeropuertos principales de España, justo antes del puente y las fiestas de Navidad, y luego por saltarse los convenios colectivos y poner a cero el cómputo de horas trabajadas de los controladores.

Bueno, os dejo el enlace al blog de Jorge para que podáis profundizar más en el asunto:
http://oraculodeoccidente.wordpress.com/2010/12/05/333-horas-%C2%BFo-mas/

Ni que decir falta, Jorge, estás invitado a proporcionarnos luz sobre este tema.

Que Dios os bendiga.